Las fiestas decembrinas pueden ser difíciles. Algunas personas las aman; algunas personas les temen.
Pensé mucho en las fiestas de Diciembre mientras escribía "Happier at Home" porque la temporada de fiestas tiende a ser un momento en que nos enfocamos en el hogar. Tal vez vas a "ir a casa de tus padres" para Navidad, lo cual puede ser divertido para ti ¿o no? Quizás estés decidiendo cómo decorar tu hogar para estos días. Tal vez estés haciendo un esfuerzo para organizar los días festivos como cuando eras un niño, o al contrario. Quizás te sientas triste o contento con respecto a quién verás o no verás.
Al hablar con la gente, parece que uno de los mayores desafíos de felicidad de las vacaciones en Diciembre, es lidiar con familiares difíciles. Quieres tener una buena cena, pero el tío Bob te vuelve loco. ¿Qué hacer entonces? ..
1. Antes de tiempo, dedica unos minutos a pensar cómo quieres comportarte.
Si has tenido experiencias desagradables en el pasado, piensa por qué fueron desagradables y qué podría hacer para cambiar la dinámica de la situación. ¿Dormir más?. ¿Darte más tiempo de viaje? Escoger un asiento lejos del tío Bob.
2. Piensa en cómo los temas que parecen ser inofensivos podrían molestar a alguien más.
Puede que pienses que estás mostrando un interés cortés, pero algunas preguntas pueden molestar a la persona de manera incorrecta: "¿Ya tienes novia?" "¿Cuándo se van a casar / formar una familia?" ¿Cuando dejarás de fumar? "¿Puedes pagar eso que compraste?" "¿Cuándo vas a conseguir un trabajo de verdad?
Muestra interés con más preguntas abiertas, ¿Cómo?: ¿Qué estás haciendo hoy en día? "o" ¿Qué te mantiene ocupado actualmente?
3. Esquiva los conflictos.
Algunas familias disfrutan discutiendo apasionadamente entre ellas; Sin embargo, la mayoría no maneja muy bien los argumentos. Si sabes que los puntos de vista del tío Bob te van a volver loco, ¡no saques el tema! Y si él lo menciona, no tienes que involucrarte. Trate de hacer una broma al respecto y di algo como: "Aceptemos estar en desacuerdo", "No hablemos de eso y dejemos que el resto de la familia comparta algo por lo cual debemos estar agradecidos", etc.
4. No bebas mucho alcohol.
Puede parecer festivo y divertido llenar tu vaso, pero es fácil perder la cuenta de cuánto estás bebiendo. El alcohol hace que algunas personas se sientan felices, pero también hace que algunas personas se sientan combativas o autocompasivas, o que disminuyan sus inhibiciones de manera destructiva.
Básicamente tuve que dejar de beber porque el alcohol me hace más conflictiva. Y si otras personas parecen estar tratando de evitar o frenar su consumo de alcohol (o su alimentación, para el caso), no se preocupen por ello ni les insistas a que se den el gusto.
En mi estudio de los hábitos para "Mejor que antes", me quedó claro que muchas personas se sienten muy incómodas cuando se sienten fuera de sintonía con lo que otros están haciendo, y eso hace que sea difícil para ellos mantener un buen hábito. No hagas que alguien se sienta expuesto o extraño en lo que está haciendo.
5. Juega tu parte en la tradición, lo mejor que puedas.
Para algunas personas, las tradiciones son muy, muy importante.
Para otros, no tanto. Pueden sentirse irritados por la insistencia de su hermano en tener exactamente la misma comida cada Día de Navidad, o por la reacción extrema de su madre a su sugerencia de cenar una hora antes. Intenta ser paciente y hacer tu parte. A largo plazo, las tradiciones y los rituales tienden a ayudar a mantener la felicidad y los lazos familiares. Por otra parte…
6. Si eres el único que quiere que todo sea perfecto, trata de relajarte a ti mismo y a todos los demás.
Para que puedas disfrutar el día, pase lo que pase. Incluso si el día no es exactamente como se esperaba, trata de disfrutar de lo que es. Mi madre una vez me dijo: "Las cosas que salen mal a menudo crean los mejores recuerdos", y es realmente cierto. Y demasiado relajo para que una experiencia sea "perfecta" a veces puede arruinarla por completo.
7. Encuentra algo de diversión.
Uno de mis secretos de la edad adulta es: el hecho de que algo sea divertido para otra persona no significa que sea divertido para ti y viceversa. Si el tiempo con tus familiares es divertido, asegúrate de pasar al menos algo de tiempo haciendo algo que sea divertido para ti. Trabajar en la cocina, jugar fútbol americano, sentarse a hablar, hacer mensajes o dibujar, ver algo en la televisión, estas cosas pueden o no ser divertidas para ti, sin importar cómo se sienta el resto de la familia, se trata también de que tú estés a gusto.
8. Encuentra razones para estar agradecido.
Agradece que puedas cocinar o que no tengas que cocinar. Agradece que puedas viajar o que no tengas que viajar. Estar agradecido por tu familia o tus amigos. Se agradecido por la electricidad, por el agua corriente, etc. Encontrar algo. Los estudios demuestran que la gratitud es un gran refuerzo de la felicidad. Además, sentirte agradecido hacia alguien ahuyenta emociones como el resentimiento y la molestia.
Puede ser que estes pensando, estas estrategias no me dicen cómo lidiar con mis familiares difíciles, me dicen cómo comportarme. ¡ Bien adivina qué ! No puedes cambiar lo que tus parientes difíciles van a hacer; pero SÍ PUEDES CAMBIAR COMO ACTÚAS TÚ … Y cuando Tú cambias, cambia la relación.
(Adaptado y Editado de Psychology Today, Gretchen R., Diciembre 2018)