La mujer pudo haber desarrollado un problema hepático poco frecuente debido a sus suplementos de cúrcuma, según los investigadores.
Investigadores de la Universidad de Arizona publicaron un informe sobre la situación única que la paciente y sus médicos experimentaron. Publicado en BMJ Case Reports el 10 de septiembre, el informe contiene lo que puede ser el primer caso documentado de hepatitis autoinmune que resultó de los suplementos de cúrcuma.
Se cree que la cúrcuma contiene muchos beneficios para la salud que provienen de la curcumina química, que se encuentra en la especia. La curcumina, que puede ser antiinflamatoria, es un antioxidante y podría ayudar a prevenir y tratar el cáncer y la enfermedad de Alzheimer. Sin embargo, un estudio de 2006 encontró que solo el 3 por ciento de los polvos de cúrcuma en peso era curcumina. Los suplementos a menudo contienen más curcumina que los polvos, pero es difícil absorberlos en el torrente sanguíneo, por lo que alguien debería tomar mucha cúrcuma para obtener los beneficios del químico.
La mujer de 71 años que figura en el informe leyó una noticia que hace referencia a un estudio sobre animales que dijo que la cúrcuma podría ayudar a prevenir el accidente cerebrovascular. Ella comenzó a tomar los suplementos junto con otros 20 medicamentos y suplementos que ya estaba tomando. Ocho meses después, un análisis de sangre determinó que tenía niveles elevados de enzimas hepáticas, lo que puede indicar un problema hepático.
Los médicos diagnosticaron a la mujer con hepatitis autoinmune, una enfermedad crónica en la que el sistema inmunitario ataca al hígado. Según los Institutos Nacionales de la Salud, puede causar daño hepático e inflamación, y sin tratamiento podría conducir a insuficiencia hepática. Si bien los investigadores no saben a cuánta gente afecta exactamente, un estudio de los países del norte de Europa encontró que entre 10 y 24 de cada 100,000 personas desarrollan la enfermedad.
A pesar del diagnóstico, los médicos no estaban seguros de qué causaba la hepatitis autoinmune en la mujer. Durante tres meses fue vigilada de cerca pero no recibió un tratamiento específico. Luego le dijo a su médico que dejó de tomar los suplementos de cúrcuma porque leyó en línea que podrían estar relacionados con problemas hepáticos. No había mencionado a sus médicos que estaba tomando los suplementos antes de ese momento.
Los beneficios en la salud de la cúrcuma son numerosos gracias a que contiene curcumina, sustancia química que le da ese brillante tono amarillo y a la que se atribuyen efectos antioxidantes y antiinflamatorios
No obstante, "aunque brinda muchos beneficios, también hay casos --advierte-- en los que se deben tener ciertas precauciones de no tomar la curcumina, como:
Mujeres embarazadas: puede producir contracciones en el útero y generar complicaciones durante el embarazo.
Personas con diabetes: si está tomando algún medicamento para controlar la diabetes, puede alterar el funcionamiento del fármaco.
Individuos que toman anticoagulantes.
Durante la menstruación: la curcumina puede provocar mayor sangrado menstrual del habitual.
"También puede causar algunos efectos secundarios en ciertos consumidores, principalmente cuando se utiliza de forma tópica (sobre la piel) mediante cremas, por ejemplo, ya que existe el riesgo de causar irritación, erupción o salpullido en personas con mayor sensibilidad a la curcumina".
"Como suplemento, también pueden manifestarse efectos secundarios. Los más frecuentes incluyen náuseas, diarrea, baja azúcar en sangre e incluso, al provocar mayor sangrado en algunas mujeres, esto puede afectar la fertilidad femenina".
"Se ha detectado en algunas ocasiones que la cúrcuma puede afectar la absorción de hierro en el organismo, lo que puede provocar cierta deficiencia del mineral y conducir a anemia en algunas personas. Por esta razón, es indispensable contar con la supervisión del médico antes de usar cúrcuma".
Por ello es bueno medir los beneficios y efectos secundarios que cada sustancia o compuesto "maravilloso" que se promueven por lo general en fuentes donde se ha documentado el daño que puede ocurrir de tomarlo sin medida y por largos periodos de tiempo.
(Adaptado y Editado de Interrante A., Septiembre 2018)