Es una molécula o sustancia capaz de prevenir o retrasar la oxidación de otras moléculas.
La reacción química capaz de transferir electrones de una sustancia a un agente oxidante se conoce como oxidación.
Las reacciones de oxidación son capaces de producir radicales libres (RL) que comienzan una serie de reacciones en cadena que pueden dañar a las células y estar asociadas un el desarrollo de enfermedades como el cáncer.
Los radicales libres son moléculas producidas cuando el cuerpo degrada los alimentos o por la exposición ambiental al humo del tabaco y la radiación.
Los radicales libres pueden dañar las células y pueden representar un papel importante en las enfermedades cardíacas, el cáncer y otras enfermedades.
Los antioxidantes evitan estas reacciones de oxidación; por consiguiente, estas sustancias sintéticas o naturales se añaden a un producto para impedir su deterioro causado por acción del oxígeno en el aire.
Los antioxidantes son sustancias que pueden proteger sus células de los efectos de los radicales libres.
Las sustancias antioxidantes incluyen:
Beta carotenos
Luteína
Licopeno
Selenio
Vitamina A
Vitamina C
Vitamina E
Los antioxidantes se encuentran en muchos alimentos. Entre éstos, las frutas y los vegetales, las nueces, los granos y algunas carnes, aves y pescados.
Los antioxidantes se encuentran contenidos en ajo, arroz integral, café, coliflor, brócoli, jengibre, perejil, cebolla, cítricos, semolina, tomates, aceite de semilla de la vid, té, romero, entre otras muchas sustancias. También son parte importante constituyente de la leche materna.
Las frutas y vegetales proporcionan una gran variedad de vitaminas, minerales y fitoquímicos, tales como los carotenoides y flavonoides.
Varios de estos fitoquímicos actúan como antioxidantes dietéticos, los cuales potencialmente promueven una óptima salud, protege las células del cuerpo y reducen el riesgo de enfermedades crónicas, como el cáncer, y las enfermedades cardiovasculares.
Algunos ejemplos son antocianidinas en las bayas, quercetina en manzanas, licopeno en tomates y sandía, beta caroteno en camote y zanahorias, luteína en vegetales de hojas frondosas.